La vida es bella es una película que relata la vida de una familia judía en la época de los nazis.
El protagonista es un hombre al que nunca le falta el buen humor tanto en los momentos malos como en los buenos, éste es un hombre judío que llega a Italia con el propósito de quedarse a vivir allí, abrir una librería y fundar una familia.
Nada más instalarse en Italia encuentra a la mujer de su vida con la que se casará y tendrán un hijo.
Pero antes de casarse tendrá que trabajar de camarero en un restaurante de lujo que es de su tío. Allí entablará una amistad con un militar nazi que más tarde esta amistad será fundamental, ya que estarán recluidos en un campo de concentración.
Tras casarse y tener un hijo, abrirá una librería que será la clave del descubrimiento de los nazis de que ese “ local “ es un local de un judío.
Tras varias visitas de éstos, deciden llevarse al protagonista y a su hijo en un tren a un campo de concentración donde los tendrán recluidos y donde tendrán que realizar trabajos forzados y donde intentarán matar al niño metiéndolo en la cámara de gas, pero a base del ingenio del padre no lo conseguirán.
La mujer de éste que no era judía no permitirá que se vallan solos el hijo y el padre por lo que pide a los soldados que estaban en la estación donde iban a llevar a los judío al campo de concentración que la manden a ella también.
A la mujer también la hacen hacer trabajos forzados como al resto de las personas que había allí.
Pero llega una noche en la que el protagonista se encuentra a aquel viejo amigo que tuvo gracias al restaurante y este amigo le pide que trabaje de camarero en una fiesta que iban a organizar los grandes mandos del campo de concentración, éste accede y será a partir de ahí cuando las esperanzas de poder salir de allí empiecen a surgir.
A la noche siguiente, los soldados empiezan a fusilar a todas las personas que había allí, tanto hombres como mujeres, pero gracias de nuevo al ingenio y el buen humor del protagonista, impide que maten de nuevo a su hijo, escondiéndolo y diciéndole que no saliese hasta que todo el mundo se hubiera ido y hasta que el lugar estuviera en absoluto silencio.
Por desgracia, el protagonista es cogido por los soldados y fusilado más tarde por uno de ellos, pero lo importante es que aunque él muriera su hijo vivió gracias a él.
Estos fusilamientos se debieron a que los nazis habían perdido la guerra y por lo que ya que la habían perdido pues decidieron matar a todas o casi todas las personas que tenían prisioneras en sus campos de concentración.
A la mañana siguiente, después de desaparecer todas las fuerzas nazis, empezaron a surgir de la nada cientos de personas que habían estado escondidas en aquella trágica noche, para así poder salir de aquel lugar que había sido su “ hogar “ en los últimos días, meses o incluso años.
Y gracias a la suerte, uno de los únicos niños que quedaban en el campo de concentración y que era el hijo del protagonista, logró encontrar a su madre en camino de vuelta hacia Italia.
El protagonista es un hombre al que nunca le falta el buen humor tanto en los momentos malos como en los buenos, éste es un hombre judío que llega a Italia con el propósito de quedarse a vivir allí, abrir una librería y fundar una familia.
Nada más instalarse en Italia encuentra a la mujer de su vida con la que se casará y tendrán un hijo.
Pero antes de casarse tendrá que trabajar de camarero en un restaurante de lujo que es de su tío. Allí entablará una amistad con un militar nazi que más tarde esta amistad será fundamental, ya que estarán recluidos en un campo de concentración.
Tras casarse y tener un hijo, abrirá una librería que será la clave del descubrimiento de los nazis de que ese “ local “ es un local de un judío.
Tras varias visitas de éstos, deciden llevarse al protagonista y a su hijo en un tren a un campo de concentración donde los tendrán recluidos y donde tendrán que realizar trabajos forzados y donde intentarán matar al niño metiéndolo en la cámara de gas, pero a base del ingenio del padre no lo conseguirán.
La mujer de éste que no era judía no permitirá que se vallan solos el hijo y el padre por lo que pide a los soldados que estaban en la estación donde iban a llevar a los judío al campo de concentración que la manden a ella también.
A la mujer también la hacen hacer trabajos forzados como al resto de las personas que había allí.
Pero llega una noche en la que el protagonista se encuentra a aquel viejo amigo que tuvo gracias al restaurante y este amigo le pide que trabaje de camarero en una fiesta que iban a organizar los grandes mandos del campo de concentración, éste accede y será a partir de ahí cuando las esperanzas de poder salir de allí empiecen a surgir.
A la noche siguiente, los soldados empiezan a fusilar a todas las personas que había allí, tanto hombres como mujeres, pero gracias de nuevo al ingenio y el buen humor del protagonista, impide que maten de nuevo a su hijo, escondiéndolo y diciéndole que no saliese hasta que todo el mundo se hubiera ido y hasta que el lugar estuviera en absoluto silencio.
Por desgracia, el protagonista es cogido por los soldados y fusilado más tarde por uno de ellos, pero lo importante es que aunque él muriera su hijo vivió gracias a él.
Estos fusilamientos se debieron a que los nazis habían perdido la guerra y por lo que ya que la habían perdido pues decidieron matar a todas o casi todas las personas que tenían prisioneras en sus campos de concentración.
A la mañana siguiente, después de desaparecer todas las fuerzas nazis, empezaron a surgir de la nada cientos de personas que habían estado escondidas en aquella trágica noche, para así poder salir de aquel lugar que había sido su “ hogar “ en los últimos días, meses o incluso años.
Y gracias a la suerte, uno de los únicos niños que quedaban en el campo de concentración y que era el hijo del protagonista, logró encontrar a su madre en camino de vuelta hacia Italia.