Beetlejuice (literalmente, ‘zumo de escarabajo’), Bitelchús en España, es un personaje creado por el cineasta Tim Burton. Beetlejuice es un difunto que vive en el no mundo, recreación del mundo real según la visión de los muertos. Beetlejuice trabaja precisamente como «exorcista de los vivos» (autodenominado «bioexorcista»), es decir, ayuda a los fantasmas a echar de su hogar, o de cualquier otro lugar, a cualquier ser vivo que les pueda molestar. Beetlejuice fue diseñado como un hombre sucio, grosero y pícaro, cuya idea de una buena alimentación son las cucarachas; va desaliñado, su mejor gala es un anticuado traje a rayas y es capaz de transformarse o de desfigurar su cuerpo a su antojo en las más diversas y grotescas formas.
Este disparatado personaje fue el protagonista de una película con su nombre, Beetlejuice, estrenada en el año 1988, dirigida por su propio creador, Tim Burton, y protagonizada por el actor Michael Keaton en el papel de Beetlejuice; Winona Ryder hace el papel de Lydia Deetz, una sombría muchacha que detesta a su padre y su madre adoptiva, Charles y Delia Deetz, interpretados por Jeffrey Jones y Catherine O'Hara, respectivamente. La película, de un delirante humor negro, fue un gran éxito por aquel año, recaudando sólo en Estados Unidos 73 millones de dólares. Para los fans de culto de Burton fue, y es hoy día, una pieza imprescindible para su colección.
La película narra la historia de una joven pareja (interpretada por Alec Baldwin y Geena Davis) que, luego de adquirir una hermosa casa en las afueras de la ciudad, sufre un accidente de coche en el que mueren, sin ellos sospecharlo. Un matrimonio nuevo, formado por la extravagante escultora Delia y su apocado marido Charles, junto con su hija Lydia, compra la casa y los fantasmas se ven deshauciados contra su voluntad, por lo que, tras descubrir su nueva naturaleza, piden ayuda a Beetlejuice, un desagradable, gritón y chapucero bioexorcista que tratará de echar a los vivos de la casa utilizando sus poco recomendables métodos.
Este disparatado personaje fue el protagonista de una película con su nombre, Beetlejuice, estrenada en el año 1988, dirigida por su propio creador, Tim Burton, y protagonizada por el actor Michael Keaton en el papel de Beetlejuice; Winona Ryder hace el papel de Lydia Deetz, una sombría muchacha que detesta a su padre y su madre adoptiva, Charles y Delia Deetz, interpretados por Jeffrey Jones y Catherine O'Hara, respectivamente. La película, de un delirante humor negro, fue un gran éxito por aquel año, recaudando sólo en Estados Unidos 73 millones de dólares. Para los fans de culto de Burton fue, y es hoy día, una pieza imprescindible para su colección.
La película narra la historia de una joven pareja (interpretada por Alec Baldwin y Geena Davis) que, luego de adquirir una hermosa casa en las afueras de la ciudad, sufre un accidente de coche en el que mueren, sin ellos sospecharlo. Un matrimonio nuevo, formado por la extravagante escultora Delia y su apocado marido Charles, junto con su hija Lydia, compra la casa y los fantasmas se ven deshauciados contra su voluntad, por lo que, tras descubrir su nueva naturaleza, piden ayuda a Beetlejuice, un desagradable, gritón y chapucero bioexorcista que tratará de echar a los vivos de la casa utilizando sus poco recomendables métodos.